martes, 20 de noviembre de 2012

Así empezó



No recuerdo la fecha con exactitud, pero ahora que lo pienso no existe mucha diferencia entre las cosas que nos separaron y las que nos unieron.
Estabas ebrio y yo algo cansada, pero no lo suficiente como para no subir a ver que hacían los chamacos, o sea  tú, tu amigo y mis primos, recuerdo que platicábamos de maravilla, quería sacarte información según yo, nos tomamos una foto y de la nada querías besarme, me resistí un poco (pues siempre creí que eras el amor de su vida de mi hermana y viceversa, siempre te vi como a mi cuñado perdido), ya sé que tu no lo recuerdas, pero insististe demasiado que termine cediendo, y no solo fue uno si no dos. Segundos después recibí un mensaje de lo más patético que pudiera ser. Al siguiente día nos vimos como si nada y es que así lo sentías tu, pues no te acordabas de absolutamente nada y tu celular se había descompuesto, maldito destino, por mi parte borre todo y seguí como si nada, solo fuiste un beso mas al aire.
Semanas o quizá meses después supiste que algo había pasado, viste la foto, tu amigo te lo conto y tu lleno de intriga me lo preguntaste  terminaste pidiéndome una disculpa, por dios quien pide disculpas por un beso, pues  tú lo hiciste y de nuevo fue como si nada hubiera pasado; seguí amando, como hasta ese entonces lo hacia, a mi novio en turno (Dante).
Comenzaste con tus planes de regresar a vivir con mi tía y por alguna extraña razón me urgía que lo hicieras, estaba emocionada, esos besos me habían gustado y mis labios pedían un poco más.
Al fin llegaste, te acompañaban tus amigos y unas cuantas de tus cosas, te instalaste. Por alguna extraña razón no solo a mi me excitaba tu llegada, mis primos estaban emocionados, planeamos salir a donde fuera, el chiste era salir. Por primera vez pude rechazar a Dante y decirle que ya tenía planes, y eso me hizo muy feliz. Salimos, bebimos un rato, bailamos (mi primo David y yo) y al fin llegamos a la casa. Mi plan se cumplió, solo bastaron unas cuantas llamadas (tres para ser exactos) pidiendo cigarros, y es que al parecer era cuando aun no entendías indirectas,  al fin estabas en mi cama, te platique un buen rato acerca de mi vida y de pronto estábamos tan juntos y sabiendo que todo podía pasar, nos besamos, me pare como loca por que escuche unos ruidos y si mas ni menos regrese a besarte, y como dicen una cosa llevo a la otra y terminamos haciendo lo que una mujer hace con un hombre llámese coger, hacer el amor, follar,, tirarse un polvo, etc.
Cuentas que después de hacerlo me puse a gritarte y a decirte pendejada y media (si ya me cogiste y ya, pues a ti que) la verdad de esa parte solo tengo lagunas. Regresaste al lugar en el que dormías y no se hablo mas del tema por un par de días hasta que decidí llamarte para preguntar si te habías cuidado, sabía que no lo habías echo, pero también sabia que no tenía por qué preocuparme, no habías ni siquiera terminado;  la verdad solo buscaba un pretexto para sacarte el tema, quería saber si se repetiría, o cualquier cosa a cerca de era buena.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

  Mi vida dio un giro inesperado de de mas de 360 grados. El día 19 de febrero del 2022 como a las 11:30 am, supe que mi vida ahora no solo ...